sábado, 14 de marzo de 2020

"La ladrona de libros" de Markus Zusak.


                                                               
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Sinopsis:

Érase una vez un pueblo donde las noches eran largas y la muerte contaba su propia historia. 
En el pueblo vivía una niña que quería leer, un hombre que tocaba el acordeón y un joven judío que escribía cuentos hermosos para escapar del horror de la guerra. 
Al cabo de un tiempo, la niña se convirtió en una ladrona que robaba libros y regalaba palabras. Con estas palabras se escribió una historia hermosa y cruel que ahora ya es una novela inolvidable. 




Autor: Markus Zusak. 

Páginas: 531. 

Editorial: Debolsillo. 

Reseña:

Quiero empezar a hablar acerca de los personajes porque creo que han sido lo que más me ha impactado. Todos y cada de uno de ellos tiene una historia y, aunque no se ahonde en ella tanto como en la de Liesel, terminas entendiendo el porqué son como son y cómo actúan. ¿Por qué tienen esa personalidad? ¿Por qué son tan duros, distantes y fríos? ¿Por qué son inocentes, buenos y puros? 

Obviamente, y como la mayor parte de las personas que han leído este libro, mis personajes favoritos han sido Liesel y Rudy, de hecho, Rudy me recuerda a mi mejor amigo de la infancia, delgado, veloz y con el pelo de color limón y ojos azules. Yo no me considero como Liesel, pero sí que es cierto que he conseguido conectar con ella y sentir sus emociones como propias y sus aventuras como si fueran las mías, aunque nuestras vidas sean completamente diferentes. 

Por parte de Hans y Rosa, me encanta Hans. Sus ojos plateados, el acordeón, las noches de lectura... le hace un personaje entrañable y querido, como si le conocieras de siempre. Es de esos personajes que calan. Rosa, tan rígida e impenetrable, pero a la vez tan sentida y con corazón enorme en el pecho, que dio de comer a un judío y quiso a una hija que no era suya como propia, ella no es la antagonista de la historia. 

Max, quizás es el personaje del que menos puedo decir, no he conectado enormemente con él y eso que, como con todos los demás, nos cuenta parte de su historia y de sus vivencias, cómo ha llegado hasta allí y por qué. 

Una vez hecho el repaso de los personajes, me voy a centrar en la trama. Es una novela histórica pero con la peculiaridad que el centro de la historia no es la guerra, sino la vida que lleva una niña cualquiera en esa situación. Desde los ojos de la inocencia, de la falta de entendimiento pero con la conciencia de que algo estaba pasando, algo que todo el mundo le dice que debe obedecer pero que ella no entiende la razón. 

En cuanto la pluma, aunque el libro tenga 531 páginas, se lee fácilmente. No tiene una narrativa densa y llena de florituras, sino que la hace fresca y divertida, por lo que eso, en un libro que es largo, me ha gustado mucho.


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